La Defensoría de los Habitantes solicitó cuentas a la Dirección de Infraestructura Educativa del Ministerio de Educación Pública sobre las más recientes acciones que se han emprendido para contar con una nueva escuela a la población que asiste al centro educativo Barrio Limoncito.

Según habitantes de la zona la escuela está en lista de espera desde el 2005 por los diferentes problemas que tiene la estructura, sin que hoy en día exista información clara de fecha para el inicio de la construcción de la nueva edificación. Según indican, desde el año 2017, los estudiantes reciben clases en la explanada de la Iglesia Católica de la comunidad, sin las condiciones adecuadas ni para los alumnos ni para el personal docente.

Los padres de familia sostienen que es necesario que se respete el derecho fundamental a la educación de manera plena, en condiciones de igualdad frente a otros estudiantes y para ello, resulta de vital importancia contar con una infraestructura adecuada para que puedan recibir las lecciones.

A pesar de que el Mep ya tiene el proyecto constructivo listo, de acuerdo con los padres de familia no se vislumbra un pronto inicio de los procesos administrativos para la dotación del nuevo centro educativo y piden información precisa a la comunidad que indique cuándo será que arrancarán los trabajos.

La Defensoría de los Habitantes solicitó un reporte pormenorizado de las gestiones realizadas para corregir las acciones previstas en las órdenes sanitarias, y además, si han valorado mientras tanto el alquiler de un lugar que no ponga en riesgo la integridad de la comunidad educativa.

La Defensoría de los Habitantes manifestó que está interesada en conocer las alternativas que se visualizan para el inicio del curso 2022 e indicar si hay presupuesto para el inicio de las obras en el presente año.